MEMORIA DE LA ESTUPIDEZ

• " ¿Sabes que quería ser de pequeño?"
• "¿Médico, como el abuelo?"
• "Qué va, lo que quería era ser contrabandista de sándalo para que a mi alrededor dejara de oler a pólvora"

MEMORIA DE LA ESTUPIDEZ

MARÍA TERESA LEZCANO

Podría ser cualquier lugar del Mundo, sus protagonistas podrían ser cualquiera, con este dilema estaremos durante toda la lectura ya que nunca se da una ubicación exacta ni tendremos jamás un nombre para ninguno de sus protagonistas, pero los identificaremos sin lugar a dudas.

Puedo decir sin temor alguno que este libro no sólo me ha sorprendido, sino que me ha enganchado y enamorado desde el principio del mismo.

Nos encontramos en una zona en continua guerra, en primer momento por el territorio, posteriormente por el odio y porque ya no se sabe hacer otra cosa. En este pueblo rodeado de cementerios, conoceremos la historia de una familia donde tenemos al Abuelo, el cabeza de familia y médico, La Madre, El Niño Muerto (muerto por una bomba que destruye el colegio donde estudiaba), el Niño de los Lirones (observador incansable), El Líder y La Niña, narradora de esta historia sin igual. 

Una absurda guerra por el territorio obliga a todos los miembros de esta familia a vivir rodeados del miedo y la incertidumbre en la zona fronteriza entre Símil e Ídem, hasta que una noche todo cambia y tienen que salir corriendo de su pueblo y emigrar a la Capital, donde después de un tiempo de sorda tranquilidad, volverán a empezar las revueltas, unas revueltas que los obligaran a entrar en un campo de refugiados.

Los años pasan, pero jamás olvidan que en su pueblo, donde la guerra sigue siendo brutalmente real, hay gente que anhela ayuda, que la necesita... mientras que el resto de países de Mundo hacen la vista gorda ante una barbarie más que provechosa para ellos.

Una historia de un realismo abrumador, de una claridad casi insultante que nos trasporta al seno de una familia que siempre vivirá anclada al sonido de las sirenas, una familia que necesitas proteger, que necesitas leer que al final todo acaba bien...

Una lectura no sólo recomendable, sino más bien necesaria por su intensidad y su magnetismo que logran que no puedas apartar la vista del libro.